La fiesta de Santa Lucia es para muchos adultos el recuerdo más bonito e intenso de la infancia.
¿Quien era Santa Lucia y como ha nacido la tradición que la ve dispensar regalos?
Entre realidad y leyenda sabemos que Lucia era una joven de Siracusa, Sicilia, de familia rica, y que fue mártir porque no quiso negar su propia fe cristiana durante la durísima persecución de Diocleziano en el siglo IV d.C.
En Italia hoy en día la tradición de celebrar Santa Lucia es fuerte en lo que era el antiguo territorio de la República de Venecia.
Aquí están las reliquias, robadas en el 1204 en Constantinopolis durante la cuarta cruzada. En Venecia Santa Lucia fue objeto de mucha devoción y cuando a causa de la caída de los comercios marítimos la Serenísima República concentró mucha mas atención en la tierra firme, el culto a Santa Lucia se extendió a todo el Véneto.
La costumbre de celebrar Santa Lucia en Véneto empezó alrededor del siglo XIII d.C., y quizás la ciudad véneta donde esta tradición es mas fuerte sea Verona.
Según la leyenda aquí había explotado una terrible epidemia a los ojos, sobretodo de los niños. Los ciudadanos decidieron entonces hacer un peregrinaje descalzos hasta la iglesia de S.Lucia. Pero los niños, con el frío que hacia en Diciembre, no querrían, así que los padres les convencieron explicándole que a la vuelta a casa hubieran encontrado los zapatos llenos de regalitos.
El prodigio tuvo lugar y desde entonces empezó la fiesta de Santa Lucia.
Entre los dulces típicos de esta fiesta están las “pastefrolle de S.Lucia”, de formas variadas, estrella, caballito, corazón, y el buenísimo Mandorlato, una variación veronesa al turrón.
En Verona para celebrar Santa Lucia desde hace un siglo hay una tradicional feria que dura tres días hasta el día 13 en la principal plaza de la ciudad, Piazza Bra, que se llena de mostradores con juegos, dulces y bombones de cada tipo.
Para coronar la fiesta cada año se puede admirar la estrella de Navidad que desde el interior de la Arena aterriza luminosa en Plaza Bra, invitando a la gente a visitar la magnifica Exposición de los Belén.
¡Que viva Santa Lucia!
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El día 13 de Diciembre llega Santa Lucia a Verona. |
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Fiesta ladina de verano en Canazei |
Desde el 03 hasta el 06 de Setiembre Canazei, pueblo ladino en el corazón de las montañas Dolomitas, ha vivido con gran entusiasmo su tradicional fiesta de cultura ladina, que este año ha llegado a su trigésima edición.
Cuatro días de alegría, música folklórica ladina, baile, desfiles en vestidos tradicionales y comida típica tirolesa para celebrar el final del verano.
El apogeo de la fiesta es el desfile del domingo, cuando las calles de Canazei son invadidas por bandas musicales y grupos folklóricos de los 4 valles de Ladinia, o sea Val de Fassa, Val Badia, Val Gardena y Val de Livinallongo.
El vestido tradicional de la gente ladina está muy relacionado con las Dolomitas, una zona que durante mucho tiempo ha sido parte del Impero Austrohúngaro, y su gente estaba perfectamente integrada en la realidad austríaca. Los Ladinos se vestían, comían, bailaban como en otras partes del Impero, especialmente en fuerte conexión con toda la región del Tirol.
Hoy en día llevar un traje tradicional tirolés es todavía para los Ladinos un rito, hay que saberlo llevar con una postura correcta, teniendo en cuenta que no es solamente un traje, sino que representa una etnia, un idioma y una historia.
Los ladinos son un pueblo de minoría étnica y desde siempre necesitan distinguirse para sobrevivir.
Esta maravillosa fiesta ayuda a los 4 valles ladinos a seguir enlazados y unidos.
A parte de la música folklórica estilo austriaco, en estos 4 días hay la oportunidad de degustar la comida típica ladina: jamón y queso local, canederli, sopa de orzo, carne ahumada, espinilla, chucrut, y polenta, claro!
Para rematar se acaba con los típicos postres ladinos: “fortaes”, postre frito que lleva azúcar y mermelada, y “sones”, postre frito con manzana.
Y para digerir una buena Grappa!
A ver si os animáis para ir el año que viene…
Ciao ciao
Sergio
PS- Photo Gallery 2009 (fotos de Sessa Anton).
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Un día en bici por la Lessinia |
(Escrito por Laura Lorenzini, Verona)
Ahora que tengo un poco de fondo y el bochorno de Agosto no deja respirar, cojo mi mountain bike y me mudo durante unos días a Boscochiesanuova, en Lessinia, y me permito pedalear en el fresco de la montaña.
A solo 40 minutos de coche de Verona todavía es posible encontrar un paisaje incontaminado, lleno de granjas, pastos, pequeños grupos de casas en piedra y mucho silencio.
La montaña veronesa, habitada antaño por el pueblo de originen alemán de los Cimbros, ofrece muchas rutas en bici.
En Agosto hice una muy bonita ruta apta para ciclistas mediamente entrenados, que ofrece un panorama a 360 grados, entre montañas y el lago de Garda: Boscochiesanuova-Castelberto.
Desde la plaza de Bosco tomar la ruta rumbo a Erbezzo, a 1.100 metros de altitud, desde donde se puede ver el Corno d’Aquilio y Sant’Anna d’Alfaedo. Quedan unos 12 kilómetros hasta la cumbre, entre vacas y plantas de nueces.
En el último tramo, hay un altiplano desde donde se ve las estupendas Dolomitas trentinas y la llanura Padana al otro lado.
Por fin se llega a Malga Lessinia, donde podemos degustar los típicos ¨Gnocchi¨ de harina blanca y la polenta con ciervo.
Volvemos a rodar, siguiendo las indicaciones para Castelberto, desde donde se ve toda la Valdadige.
La vuelta, pasando por Podesteria, es agradable con mucha bajada hasta Boscochiesanuova.
Un total de unos 45 kilómetros, con calma, para disfrutar del aire puro, el sosiego, el panorama estupendo y la comida de Malga Lessinia.
¡A pasarlo bien!
Laura